Una exposición magistral, colega. No solo me deleita, sino que termina por convencerme.
Había anotado algunos de los factores, pero cabe apuntar que la diferencia no se dilató a causa de las faltas en los segundos de locura, sino que se consagró en el preludio del último cuarto. Los Devils patentaron una ventaja de casi veinte puntos en los dos minutos iniciales del último período.
Fui consciente del riesgo que suponía formar a Ovando como base sin que exhiba las cualidades de uno. Durante la noche estuve meditando acerca de las fortalezas de los Devils y repentinamente me centré en Koczka y Stockton. ¡Bingo! Dos bases de alta calificación, frente a Ovando (juvenil sin apenas pases) y Cerbito que es un base incompleto.
Cuando planifiqué el entrenamiento de la semana, acepté correr esos peligros (alinear a Ovando como base). Sin embargo, me costó, primero, distinguir el lento fluir de mi equipo y, segundo, la poca incidencia de ataques.
En este momento me encuentro modelando bases, circunstancia que me induce a tomar a mi único base (que pronto no será más un stellari) e improvisarlo como escolta.
La clave de los Devils está en su movimiento ofensivo. Su segunda posición no es producto de la fortuna, sino de una sesuda estrategia. Me complace advertir esto, pues nutre mis conocimientos del juego.
Una vez más, gracias colega por la elucidación.
Puedo declarar que, a la luz de esta explicación, el resultado semeja comprensible.