Colega, créeme que lamento decepcionarlos, pero no me di abasto para elaborar la nómina de salarios por equipo. Había olvidado por completo el asunto, aunque al cerrar las contrataciones comencé a manejar algunas cifras. Asiduamente reviso las plantillas de cada equipo y efectúo sumas mentales, a fin de sopesar el gasto en plantel de cada escuadra rival. Empero jamás he dado con un global exacto, pues carezco de calculadora científica.
Entiendo que después de mi última confesión más de uno ha de haber proferido una exclamación de pasmo. Lo cierto es que solía tener una calculadora científica estupenda, gran herramienta, pero cuando mi hermana despegó en diciembre le presté mi calculadora pues la suya estaba fuera de foco. Así me despojé de un accesorio de invaluable utilidad en éstas circunstancias. Y por increíble que parezca, no poseo otra calculadora pues mi profesión no me exige una.
Ésta temporada me será difícil visitar cada plantel y someter al conteo necesario el sueldo de cada jugador, pues el tiempo se ciñe a mí como el remolino de una serpiente.
Juzgo idóneo confeccionar la lista de cara a la siguiente temporada antes que ésta, pues ya estamos en las postrimerías. Pronto, en cuestión de semanas, los salarios volverán a ajustarse y las sumas no tendrán mayor efecto.