Jajaja. Esto sí es trolleo sano, cullons!!
Clarísimamente voto por la opción D. De hecho, ahora estaba hablando con Marin para ponerlo un poco más caro y que la denuncia sea todavía más evidente. Incluso he cambiado sus declaraciones
De todas formas, he de decir que, obviando tonterías como su sueldo o sus habilidades, es un enorme jugador de pocha y su presencia en cualquier vestuario asegura ratos de buenos momentos. Además, tiene tal torpeza con las mujeres que hasta Luis Botín Ríos, a sus 44 años y en forma inepto, se siente Nacho Vidal a su lado. Por tanto, es un elemento de un valor incalculable para generar autoestima en sus compañeros de vestuario. Yo ya le he comentado varias veces que su sino cambiará en cuanto se deje de teñir el pelo y las cejas de naranja. Pero él siempre me responde que el verdadero color del pelo no se mide en la cabeza, sino en los sobacos, los cuales son negro zafiro.