Sin duda, desde el sábado pasé por todas las defensas posibles, desde 2-3 al principio, hombre luego y terminé arriesgando la más loca 3-2.
Con los externos logró eso de que puede jugar de cualquier manera, y además, debe haber entrenado forma para tener a todos en 9, lo que lo hacía más impredecible aún.
Ya arrancamos la reconstrucción para poder aguantar la economía y seguir peleando la que viene.