En realidad no. Tengo allegados a diferentes ámbitos del fútbol (compañeros de equipo, entrenadores de intferiores, jugadores de reserva, publicistas, etc) y te puedo asegurar que lo que me han contado da asco. Sea fantasía o exageración la verdad que de afuera da pena saber que no se transpira y no se siente la camiseta. Y no se salva nadie, ni mi ídolo San Martín Palermo.
El fútbol dejó de ser un deporte, y es un negocio.
Lo mismo pasa con el Tenis y la Davis.
Le tengo más fe a las leonas y a una buena campaña de la selección de Basket.
Y fútbol por amor y pasión es el de los Murciélagos.
Abrazo!