jejeje.
Sí. Hubo suerte. Y diré más, de las mejores noches de mi vida. Joder qué muchacha, sólo de pensarlo me sigue cayendo la babilla...
aunque he de reconocer que ya llevaba mucho tiempo trabajándomela, son muchas hora de estudio "perdidas". En las bibliotecas se liga bastante más de lo que cree la gente.