Un saludo a todos.
Está a punto de comenzar el partido y os comento cómo hemos decidido en el staff enfocar el partido.
Dada la situación de Alemania (con prácticamente todos sus pivots y ala-pivots en excelente forma) y su escaso gusto por los lanzamientos desde la línea de 7 metros (sólo han jugado claramente por fuera contra Andorra en lo que es, claramente, una probatura), hemos decidido defenderles muy fuerte por dentro.
Por otro lado, y puede que contra pronóstico, hemos decidido atacarles también por dentro. Ellos suelen defender siempre individual, así que nuestro ataque no iba a influir mucho en ellos, según parece.
La figura que ha provocado todo esto y la pieza básica hoy es un hombre que no ha sido excesivamente utilizado hasta la fecha: Peñalver. El pupilo de kasky va a salir en la posición de 3 buscando reforzar la defensa interior, el rebote y el ataque interior (siempre un poquito mermado por la presencia de super Chuse, que hoy no podía faltar a la cita). Los dos aleros más usados de Alemania (prácticamente se comen el 100% de los minutos alemanes en este puesto) son hombres interiores con alergia al triple, por ello Peñalver puede ser la gran clave para frenar a estos hombres.
Con esto buscamos apoderarnos de la zona ante un equipo que, posiblemente, piense que la zona va a ser suya. No va a ser fácil, pero es la apuesta que hemos hecho. Si conseguimos que nuestro ataque interior pueda con su defensa interior, que nuestro rebote sea superior al suyo y por último, lo más difícil, que nuestra defensa interior supere a su ataque interior (que puede ser espectacular) tendremos el partido en el bolsillo. Creemos que podemos conseguirlo.
¿El riesgo? Que sorprendan a propios y extraños atacando por fuera con una línea exterior no habituada a ello y que, sin estar para nada mal de forma, está lejos del estado de los interiores. En tal caso, nos pueden hacer daño... aunque es muy posible que ello provoque que el rebote se incline más aún a nuestro favor y que su defensa interior se vea algo más mermada ayudando a nuestro ataque.
No va a ser fácil, pero después de darle mil vueltas pensamos que esta era la mejor forma de ir a por el partido.
En hora y media sabremos hasta qué punto todo esto ha merecido la pena.